Las Autovías de los Consejeros: Toledo-Ciudad Real

¿Quién viaja por las autovías de Castilla-La Mancha? Los Consejeros de la Junta.

Así de claro, se empeñen lo que se empeñen, los habitantes de Guadalajara, Toledo o Ciudad Real tienen poco interés en ir a otras ciudades de su comunidad autónoma, y cuando salen de su ciudad se van a Madrid. Las autovías que comunican unas capitales de provincia con otras solo sirven para que los Consejeros y los Directores Generales puedan hacer dos o tres inauguraciones al día en vez de “solo” una o dos. Y no es que lo diga yo, no hay más que ver que ninguna de las conexiones entre las capitales de Castilla-La Mancha tienen una intensidad media de vehículos superior a los 5.000 vehículos/día.

Una autovía que les falta a los Consejeros es la de Toledo a Ciudad Real. Ya intentaron que fuese el Gobierno de España quien la construyese, y por lo tanto pagase, al ligarlo al eje Toledo-Córdoba, pero les ocurrió lo que nunca se hubieran imaginado: el Ministerio de Medio Ambiente publicó una Declaración de Impacto Ambiental negativa. Aunque a ellos les debió extrañar mucho, la verdad es que a cualquiera que sepa un poco de esto no le extraña nada ya que esta autovía debe atravesar dos de las joyas de la corona muy frágiles: los Montes de Toledo y Sierra Morena.

Una vez recuperados del susto, los Consejeros, han retomado la iniciativa y es la propia Junta la que promueve la autovía Toledo-Ciudad Real, aunque no sin pedir al Ministro de Fomento que se el quien la pague.

Recientemente acaba de terminar el periodo de información pública al Estudio de Impacto Ambiental y como no podía ser menos SEO/BirdLife hizo alegaciones y solicitó que proyecto sea desestimado por ser inviable desde el punto de vista de la conservación de la naturaleza y porque su ejecución supone un impacto ambiental inasumible. La alternativa más directa entre las dos ciudades afectaría a, al menos, dos territorios de águila imperial ibérica y a un hábitat mediterráneo muy bien conservado.

Algunos de los motivos por los que el órgano ambiental, esta vez de la Junta de Castilla-La Mancha, debe dar otra DIA negativa son:
1) Que no se han evaluado alternativas que no afecten a la ZEPA, máxime que el órgano ambiental obligaba a ello.
2) La falta de justificación para llevar a cabo el proyecto.
3) La afección a las especies de aves por las que se designa la ZEPA.
4) La fragmentación del proyecto.
5) El hecho de que este proyecto tuviese previamente una Declaración de Impacto Ambiental negativa.

¿Cuánto dinero nos costará a los españoles que un Consejero se mueva de una ciudad a otra? ¿Cuántas águilas imperiales? ¿Cuánto patrimonio natural?

Desde SEO/BirdLife se trabaja para que sea lo menos posible.