Menos dinero para la Biodiversidad


A finales de julio el gobierno consiguió in extremis la aprobación del techo de gastos para los Presupuestos Generales del Estado de 2011, en total un recorte del 7,7% respecto a 2010. Sin embargo, ese recorte no es lineal en todas las partidas, de forma que las previsiones actuales es que haya un recorte cercano al 50% en el presupuesto de Conservación de la Biodiversidad. Eso quiere decir un freno importante al desarrollo de la Ley de Patrimonio Natural, recortes en las subvenciones a las ONG, poco apoyo del Ministerio a la eliminación de amenazas por parte de las Comunidades Autónomas, recortes a las asistencias técnicas del Ministerio, etc.

Es cierto que estamos en una gran crisis económica, pero no es menos cierto que también estamos inmersos en una enorme crisis de biodiversidad. Por supuesto, todo el mundo debe aprestarse el cinturón, pero es más claro que deben hacerlo los que más agujeros tienen a la derecha de la hebilla. El año pasado, por ejemplo, la subdirección general de biodiversidad contaba tan solo con dos técnicos para coordinar las estrategias nacionales de todas las especies amenazadas de España. Es decir que un mismo técnico tiene que ser, por ejemplo, experto en águila imperial y en mejillón cebra. El presupuesto ha sido tan pequeño que un recorte de un 50% no representaría nada en los PGE.

Desde luego, no es aceptable que en los próximos presupuestos generales del Estado se reduzca el presupuesto del Ministerio de Medio Ambiente, pero si fuese así habría que hacer los que sea necesario para que haya un mayor presupuesto que en 2010 para políticas de conservación de la Biodiversidad en perjuicio de otros departamentos históricamente mejor tratados..

No es posible que un mismo gobierno apruebe las Prioridades de Cibeles y luego reduzca el presupuesto de biodiversidad.